Creí estar haciendo las cosas bien, y me equivocaba. Creía estar ganando en un juego donde yo era la perdedora. Creí que todo estaba bien, hasta que hoy, me dí cuenta, que no es verdad, que solo estaba cada vez empeorando más, que me estaba intoxicando con mi propio veneno, que estaba fallandome a mí, y no a los demás. No es demasiado tarde, pero cuando uno espera tanto para abrir los ojos, siempre el choque de la pared es más difícil evitarlo.
Uno a veces critica a los demás, cree que ellos fallan y cree ser perfecto, cree ir por el camino correcto, y a mitad de este, te das cuenta que fuiste al lado equivocado, ¿Y como te cambias de destino? No lo sé, pero es lo que tengo que hacer.
Lo duro que es verte al espejo y decir "yo no era así". Darte cuenta que muchos lograron evitarlo, pudieron remediarlo y tú sigues ahí, cuesta abajo y observando como todo pasa, sin hacer nada, y no es así, porque TIENES QUE LUCHAR, TENGO QUE LUCHAR.
Peor que te decepcionen los demás, es decepcionarte tú misma #
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