03.07.2012 ABUELO ♥

“No hay que aferrarse, en esta vida no tenemos nada asegurado” me dijo más de una vez mi papá, ¿y qué tan cierto como eso? Sólo tenemos una cosa asegurada cuando ya nacemos, la vida y la muerte. ¿Y cómo aferrarme a eso? A la vida, incluso podría, pero ¿A la muerte?

Se fue, y siempre tengo la idea presente, abuelos, o incluso cualquier otra persona se puede ir en el momento menos pensado, pero incluso ¿Te lo imaginarías? Así sin más, sabiendo que en realidad su salud está igual de regular que los días anteriores, no, simplemente no pensas “Bueno es probable que mañana no esté más” O quizás, sí, lo pensas, pero no te das cuenta de lo que eso significa hasta que eso paso, no te das cuenta que no lo vas a volver hasta que se va, no te das cuenta que simplemente se fue, y en algunos caso sí, en el mío no, no te pudiste despedir porque se fue de la nada, llegas y te dicen “A tu abuelo esta mañana le dio un infarto al corazón”. Me negué, intenté analizar lo que había dicho, me parece que no entendí, me negaba a aceptar lo que no podía estar más claro. Siguieron hablando, diciendo cosas, no me acuerdo, la verdad no sé, dije, sí yo hablé y dije cosas como para que no lo vieran tan mal, me sentí en el lugar de aceptarlo, de entenderlo, “son cosas que pasan, son abuelos…” y pensaba en las últimas veces que lo había visto, tanto tanto tanto lo quería! Es cierto, no tenía ese tipo de relaciones que tienen algunos con sus abuelos en las que sus abuelos son lo más lindo, los tienen re cercanos, todo. No, no tengo ese tipo de relaciones, nos llevamos bien, hablamos, nos interesamos, nos re queremos, pero no es tan cercana la relación, aunque, teniendo en cuenta que era el anteúltimo abuelo que me quedaba (y la otra esta leeeeejos y ni siquiera sabe quien soy por culpa del Alzheimer) me apenó mucho saber que se fue. Quizás simplemente era lo mejor para él, digamos que tenía algunos problemas, pero, aún así, no me consuela lo suficiente. Anoche me pasaron por la cabeza tantas imágenes, tantos momentos…Quizás todo se dio así porque era el momento adecuado. Mi familia y yo nos habíamos mudado acá y al fin lo habíamos “recuperado” ya que por la distancia antes la relación era nula. Mis otras primas y primos que también vivían lejos lo habían visto, en enero pasamos momentos geniales con toda la familia, con todos aquellos que no veíamos hacía mucho, fue un mes impresionante. Y más adelante vinieron mis otras primitas chicas, y lo vieron, visitamos al abuelo y él estaba feliz de la vida. La otra vez que él tuvo el problema de la rodilla lo fui a visitar al hospital con el lindo de mi primo y le compramos facturas, estuvimos un rato con él, lo hicimos feliz ese día; me puedo quedar con lo mejor ¿no? Tengo que agradecer porque al menos sé que todo lo que pasó últimamente a él le hizo bien, sé que estuve presente, que estuvimos cercanos con miles de cosas, también que lo ayudé al principio cuando llegué y no tenía nadie que lo cuide. Al menos, después de todo, puedo saber que se fue tranquilo.

Y hoy, que era el velorio…Lo siento abuelo, donde estes perdoname por no ir.

Yo sé que él donde esté me ve, me entiende, lo valora igual…Lo pensé, enserio dudé, tuve la idea inicial de ir, pero lo volví a pensar ¿Llorar más? No creo que sea un buen momento, no es mi momento al menos, supongo que prefiero aceptar la realidad, su ausencia, a mi ritmo y por mí misma. Sólo de pensar en casi toda la familia reunida, todos llorando por la misma persona…Quizás como una de las nietas mayores debería asistir, pero, no. Simplemente no pude hacerme a la idea de estar ahí, escuchar palabras de apoyo sólo me hacían llorar más, y no, por mucho que fuera como “mi responsabilidad” prefiero hacer como un día común de mi vida y así intentar estar un poco mejor, evitar pensar demasiado en eso. Evitar, ante todo, ver como los demás sufrían lo mismo, porque sé que para mi primo este año no es la primera vez que tiene que sufrir algo así, porque sé que para mi papá (aunque lo sufra de manera distinta por la experiencia) es su papá, eso es peor…Porque sé que todos los que están allá están mal y ¿Cómo hacer de apoyo si apenas yo puedo mantenerme bien? Sí eh, puedo sonreír, lo logro, pero no sin las lágrimas.

Y nada, en fin. Quizás esta fue la semana de la dulzura más amarga que haya habido, quizás el 03.07.2012 haya sido una fecha muy triste, pero, a fin de cuentas, son cosas que pasan, y no va a ser la única persona, al menos me quedo contenta por el último tiempo. Te voy a extrañar muchísimo abuelo! Un día nos vamos a ver de nuevo (: Hasta entonces! Aunque sé que estás desde una estrella viéndome, sé que estas conmigo ♥  

P.D: GRACIAS POR TODO