Clear your mind

Clear your mind

jueves, 6 de marzo de 2014

Desde mi balcón (1) "Niños"

Nati. La ilusión con la que comparto sangre. 
Una plaza, enorme ¿Enorme? Mentira, digamos que es bastante pequeña. No muy linda para mi gusto, constantemente ruidosa y aunque puede parecer vacía, siempre se escucha algún lloriqueo infantil o alguna moto insolente. Chicos empezando su adolescencia siempre jugando al fútbol, si bien es algo sano, detesto esos gritos constantes, muy característicos de cualquier humano que juegue al fútbol. 
Mis pensamientos se centran en aquel nene de pantalones azules ¿Lleva toda la tarde en la plaza o lo confundí con otro? Sentado pacientemente al lado de una nena más chiquita, la espera mientras ella habla ¿Amor de familia? Amor puro definitivamente. Yo creo que de chico los sentimientos son mucho más sinceros y se van complicando a medida que crecemos (o los vamos complicando). Tenemos ese vicio de querer analizar todo lo que nos pasa ¿Por qué y para qué? Siendo pequeños no buscamos la infinidad de las relaciones, tampoco les marcamos un tiempo de vida, no establecemos normas y exigencias sobre otros para quererlos como queremos, no sentimos ese amor rencoroso que busca volver para devolver, ni esa enemistad obsesiva que nos lleva a ser quienes en el fondo no somos.
Quizás lo más lindo de un chico es la ilusión. Escuché en repetidas ocasiones que los chicos tienen mucha imaginación, en mi opinión es porque no le ponen límites a la realidad, no la encierran en una caja y dicen "es así y asá". De chicos pensamos que todo es posible, no buscamos tantas explicaciones porque no las necesitamos. Ni fórmulas químicas ni experimentos científicos, creer se trata de algo meramente personal. Las horas que marca el reloj no van a impedir que Papá Noel recorra el mundo, ni la falta de espacio en un armario evitará que entre un mounstruo.
Una vez leí que los adultos son niños educados ¿Niños educados o la destrucción de los niños? Ser adulto no debería ser como matar ilusiones, ni vivir más serio, ni creer menos, ni pensar más, ni dejar de sentir ¿Por qué no puede un adulto encaminar las ilusiones de un niño? Buscarles un huequito en un mundo un poco cruel ¿No sería la fantasía una salvación? Creo fielmente que los chicos son un golpe de suerte; Para ser tan pequeños van cargados de ganas de vivir, locura, ilusión, risas y sinceridad. Sinceridad porque no vas a ver un niño fingir lo que no siente ni ser lo que no es. Y el resto, nosotros, pudiendo estar tan llenos, estamos tan vacíos. ¨Hay que ser realistas¨ repetimos constantemente, como si eso lo fuera todo, como si se acercara al menos un poco a una ¨virtud¨. Realismo decimos, cuando puedan explicarle ese concepto a un niño, entonces, y solo entonces, voy a perder las esperanzas de un mundo con un poco más de ilusión.

La realidad no es una mierda, nosotros llamamos a la mierda "realidad".


No hay comentarios:

Publicar un comentario